En este libro se reflexiona sobre la relación entre religión y pobreza en el Uruguay del siglo XXI. Se intentará esclarecer los nexos que existen entre los diversos sistemas de creencias y las condiciones de pobreza de la población. Tomando en cuenta tres religiones de interés, una tradicional (Iglesia Católica) y dos nuevos movimientos religiosos (Iglesias Evangélicas Neopentecostales y Religiones Afrouruguayas), se intentarán conocer en primer lugar los discursos sobre la pobreza de las distintas religiones y las estrategias que despliegan para superarla. En este sentido se buscará responder si las distintas cosmovisiones religiosas de la pobreza contribuyen al desarrollo, o por el contrario, perpetúan las estructuras sociales de producción y reproducción de la pobreza. Será también de interés caracterizar socioeconómicamente el perfil de los fieles de las tres religiones mencionadas. El último foco de interés será reflexionar acerca de las reivindicaciones de justicia social de estas religiones y las responsabilidades sociales que asumen sus fieles en la lucha por un mundo más justo.