El cambio climático debe entenderse como el período interglacial que el planeta presenta, combinando cambios atmosféricos resultado de la actividad humana al hacer ciudad: crecimiento extensivo, uso inadecuado del suelo, explotación intensiva de los recursos naturales. También, es suma de cambios sociodemográficos, como envejecimiento, pobreza y cómo se distribuyen geográficamente. Se menciona que el cambio climático incrementará la ocurrencia de riesgos por efectos metereológicos, por lo que, las ciudades latinas, donde existe una mezcla de usos de suelo, estándares de vida diferenciados y prácticas políticas de permisividad, producirán mayor impacto social, ambiental y económico en las poblaciones con menor resiliencia. La ocurrencia de desastres a nivel internacional se presenta continuamente, en América Central al menos una de cada tres personas está expuesta a algún desastre. Las previsiones realizadas por instituciones de apoyo mundial como CEPAL, pronostican aumento de los impactos sufridos por los fenómenos hidrometeorológicos extremos, como huracanes, precipitaciones extremas que causan inundaciones y sequías intensas.