El autor declara la ausencia de teorías consecuentes contemporáneas de la arquitectura, pues las crisis ambientales y sociales han modificado las circunstancias en el mundo sin cambiar aun las formas de producir las edificaciones, con un alto costo ambiental a pesar de los bonos verdes. La cuestión de la identidad sigue sin resolverse y el libro plantea aspectos tratados con definiciones sencillas, afirmando que toda práctica contiene una teoría y para evitar la banalidad plantea profundidad de pensamiento a través de lecciones accesibles, un método surgido gracias a los años de docencia en Universidades publicas y comunidades.Cuestiona la sustentabilidad y propone una forma de concebir la naturaleza, el espacio, el ambiente, el territorio, las reglas de habitabilidad y la tecnología en un lenguaje para lectores de diversa índole. Pleno de definiciones, propone a la arquitectura como disciplina y como objetos habitables en una visión continua en donde la territorialidad y las edificaciones contenidas en ella son un mismo objeto fraccionado.