Preocupa en el mundo entero el incremento exponencial de casos de abuso sexual y/o violaciones, de las cuales se radica o no la respectiva denuncia y que acontecen desde la más temprana infancia y en la adolescencia. Los profesionales que trabajamos en el área de salud mental, intentamos abordar esta problemática, observando cuales serían los factores que favorecerían el incremento y las consecuencias que sufren estas criaturas, sabiendo que las mismas poseen el derecho a vivir....qué término: vivir. No me cabe duda alguna que todos deseamos, que ese "vivir, sea el mejor para todos los niños". Desde la parte judicial, el incremento de las denuncias por abuso ha crecido notablemente y nos ha llevado a ahondar en la cruenta realidad que viven los pequeños, algunos con la connivencia de los adultos cercanos. Es nuestro deseo que en estas páginas encuentren y encontremos todos, aunados, un modo de abordar con equipos inter-disciplinarios y protocolos establecidos, en conjunto con las Instituciones que los asisten y de ser posible incluir en los mismos a la población para buscar soluciones y tratar de erradicar este flagelo que nos aqueja. Trabajemos por los niños: son el futuro.