En las últimas décadas el Consentimiento Informado (CI) se ha instaurado como un derecho nuevo, que reconoce la autonomía de los sujetos y concede el privilegio a las decisiones del paciente, por ser la aceptación autónoma de una intervención médica, o la elección entre cursos alternativos posibles. En tal sentido el Consentimiento Informado (CI) es la base en la actividad sanitaria en el diagnóstico y tratamiento de los pacientes. Es parte de los derechos en salud, pero también nuevos deberes, para los profesionales y para los usuarios. El Consentimiento Informado (CI), no solo se circunscribe a la Práctica Clínica sino también al ámbito de la Docencia e Investigación como analizaremos en presente texto. Actualmente nos encontramos en medio de la Pandemia del COVID – 19 (Coronavirus), el contexto del Consentimiento Informado a cambiado sustancialmente toda vez que en casos extremos no es posible solicitarlo y obtenerlo por dificultades propias de las circunstancias y se presentan Dilemas Éticos para el medico a cargo del paciente que debe ser resueltos en una Junta Medica o por el Comité Ético Asistencialdel Centro Sanitario.