La educación aplicada a las personas con necesidades educativas especiales, abarca una serie de competencias que debe manejar el docente especialista, además de un conjunto de conocimientos que inciden en la actuación profesional, contemplando todos los aspectos que van a condicionar la intervención educativa en las áreas que la conforman, en especial las Dificultades de Aprendizaje. Para el desempeño y logro de las competencias docentes, se debe iniciar con el diagnóstico diferencial que corresponde a la evaluación psicopedagógica del escolar, la cual debe enmarcarse en una serie de prácticas educativas que van a referirse al fundamento teórico que sustenta el área, para luego ofrecer dicha acción didáctica bajo un modelo de planificación ajustado a las adaptaciones curriculares de los niveles de enseñanza, en el que se encuentre el estudiante; situación que no es favorable ni para el estudiante ni para el docente.Motivado a lo antes expuesto, se plantea la necesidad de crear un modelo pedagógico que le permite al docente guiarse para minimizar las dificultades de aprendizaje, sustentado en áreas motivacionales y personales que le orientará para ofrecer una educación de calidad.