Este estudio fue llevado a cabo en un momento en que la crisis económica de Venezuela estaba haciéndose sentir, menguando así el sistema de salud. Factores como el recorte de presupuesto para la asistencia hospitalaria, así como el bajo aporte calórico y de nutrientes por parte de las dietas suministradas por las instituciones a pacientes con requerimientos aumentados, las dietas terapéuticas monótonas con sabor, presentación y temperatura poco apetecibles, la anorexia, las dificultades para la ingestión de alimentos, los trastornos gastrointestinales, además de la patología de base, entre otros factores, pueden influir sobre el detrimento del estado nutricional de los pacientes hospitalizados, conllevando a un aumento en las complicaciones de estos, debido al incremento en la incidencia de infecciones y dehiscencia de suturas; lo que condiciona a una menor respuesta al tratamiento administrado por parte del personal médico y a un mayor tiempo de hospitalización, así como a un aumento de las tasas de morbilidad y de mortalidad, a mayores índices de reingreso, y por tanto a un aumento del presupuesto destinado a las instituciones hospitalarias.